La regata Puig Vela Clàssica volverá a surcar las aguas de Barcelona del 13 al 16 de julio de este año en su décimo quinta edición. La emblemática regata de barcos clásicos – y una de las citas clave del entorno náutico internacional – recupera su esplendor tras la pandemia.
Siguiendo la tradición que se inició en 2008, la élite de la vela clásica vuelve a reunirse para mostrar la belleza y elegancia de estas embarcaciones, siendo Barcelona la única capital internacional que acoge un evento de estas características tan especiales.
La regata Puig Vela Clàssica Barcelona continua de este modo su apoyo a la ciudad con la voluntad de seguir formando parte del calendario anual de los eventos más atractivos de la capital catalana. Así, el próximo miércoles 13 de julio, en el Real Club Náutico de Barcelona, volverán a soltar amarras un grupo selecto de las más relevantes joyas clásicas de la historia náutica internacional, animando la costa barcelonesa hasta el sábado 16.
Un espectáculo visual para toda la ciudad con lo mejor de la vela clásica
El Real Club Náutico de Barcelona, la playa de la Barceloneta, el Port Olímpic o el Port Vell son algunos de los miradores de excepción que, desde la primera edición, han permitido poder disfrutar de cerca de este espectáculo a miles de ciudadanos y visitantes de Barcelona en estas fechas.
La regata de clásicos más relevante del panorama náutico español es un evento deportivo que, además de su honda tradición náutica, impulsa un mensaje de respeto medioambiental único integrado en el objetivo medioambiental de Puig. Solo una regata de veleros clásicos, embarcaciones ajustadas a una estricta normativa de materiales de construcción tradicionales (maderas, bronces, algodón, cáñamo…) y gobernada por el viento, puede presumir de respetar el entorno natural.
Más de 300 regatistas de todo el mundo
En el año del renacer de la Regata está confirmado el máximo nivel competitivo, estando ya inscritos distintos ganadores de ediciones anteriores como el Alba o el Yanira, y tripulaciones españolas, italianas, británicas, alemanas, francesas e incluso norteamericanas. Se espera que más de 300 regatistas internacionales de primer nivel compitan en las distintas categorías con el mismo espíritu de ediciones anteriores: pasión, trabajo en equipo, compromiso, entusiasmo y respeto por el medio ambiente.
La regata recuperará además su actividad social en el atractivo village que se crea para cada nueva edición en el RCNB, punto de encuentro de tripulantes de múltiples nacionalidades y en el que se dan cita campeones mundiales, olímpicos y decenas de marinos de leyenda.